Septiembre 20, 2024

En 2016 la sra. Raquel Verdugo tuvo una caída en el supermercado Líder de Bueras, por lo que la empresa la destinó a la Clínica Alemana, donde se produjo una presunta negligencia médica que le ha ocasionado serios problemas en su espalda, que la llevan a desplazarse por andador. Para el próximo semestre se espera un veredicto del caso.  

Raquel Verdugo (71 años) nunca pensó que una de sus habituales compras en el Líder de Valdivia terminaría marcando su última etapa de vida. El 28 de enero de 2016, tras acompañar a su hija a sus tratamientos médicos en el Hospital Base, se enredó en la escalera mecánica del supermercado, lo que le ocasionó una fuerte caída. El local la llevó a la Clínica Alemana, donde se le tomaron algunas radiografías. El diagnóstico de los facultativos arrojó una contusión, por lo que se le dio de alta y regresó a su residencia en Lautaro, Región de La Araucanía.

No obstante, en esta comuna tuvo que acudir reiteradamente al Centro de Salud Familiar (Cesfam) porque los dolores eran incesantes. Los facultativos le sugirieron que vea el tema en Valdivia. La hija de la sra. Raquel se comunicó con la gente del Líder, pidiéndoles que cumplan con la atención médica. “No obstante, señalaron que eso no era posible, pues ellos ya habían cumplido llevando a doña Raquel a la Clínica Alemana y pagando en aquella ocasión”, reza el documento judicial.

Un nuevo examen del Hospital de Valdivia determinó que tenía una lesión vertebral, lo que había desarrollado una “enfermedad de Kummel”, que no tiene cura y genera un encorvamiento en la columna. Esto le ha obligado a usar corsés y un andador para su desplazamiento, y seguir un tratamiento kinesiológico, que no era posible en Lautaro. “Mi vida ha cambiado un 100%. Apenas puedo caminar unos pasos y me tengo que sentar. No he podido comprarme un catre clínico, que me recetaron. Además, estoy endeuda por las compras de los calmantes”, comenta Raquel Verdugo.

Aunque agradece la atención del doctor Francisco Adriazola del Hospital, asegura que le sugirió que no vea a otros traumatólogos. “Para mí eso fue porque él también trabaja en la Clínica Alemana y supieron que yo estaba viendo mi problema con abogados”, indica.

En efecto, ante la negativa de Líder y la Clínica Alemana de costear su tratamiento médico, en enero del año pasado (poco antes que prescribiera el caso), la sra. Raquel presentó acciones legales. Con el apoyo de Juristas Asociados en Defensa, Asesoramiento y Representación Integral (Jadari) interpusieron una demanda civil por incumplimiento de contrato en contra de ambas entidades y una demanda criminal contra los doctores Renato Varela y Roger Born, involucrados en la presunta negligencia médica. “Primero, demandamos al Líder porque ellos prestaron un contrato de transacción para resolver un problema médico, que fue ejecutado mediante la Clínica Alemana, que se realizó de forma defectuosa. Por ende, Líder es responsable del accionar de quien contrató”, comenta Edison Rivera, abogado patrocinador de la causa.

Por los daños emergentes (gastos médicos y traslados) y el daño moral a la sra. Raquel, que perdió su calidad de vida y tendrá que vivir sus últimos años en un andador, están pidiendo una indemnización de 86 millones de pesos. Hace unos días se realizó la audiencia de conciliación, en la cual ni los representantes de las empresas ni de los abogados presentaron ninguna propuesta económica para reparar el daño causado.

“Todos los demandados han tratado de desentenderse del proceso, por eso han interpuesto acciones para alagarlo. Por otro lado, está el seguro de la Fundación de asistencia legal (Falmed) para cubrir estas eventualidades, pero los médicos no han querido acogerse a este instrumento. Desconozco las razones”, señala Rivera.

Sin aceptar la conciliación, el juicio continuará. Se espera que el segundo semestre de este año se dicte sentencia. “Este es un caso emblemático, porque hay una afectación a la tercera edad, un grupo que, históricamente, ha sido desplazado en sus intereses. Por eso, esta es una linda oportunidad de reivindicar sus derechos”, finaliza Rivera.

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