Unas sesenta personas participaron de la actividad, que es presentada por la Unión Comunal de Juntas de Vecinos y financiada por la Asociación Patrimonial Cultural Región de Los Ríos y la Ilustre Municipalidad de Valdivia.
Uno de los objetivos que se propusieron los dirigentes valdivianos en su proyecto de montaje de la Pérgola de las Flores fue llevar la cultura a las poblaciones y los sectores rurales de la comuna. “Como dirigente de este sector es un honor traer la obra hasta acá. Estoy con el pecho lleno al ver a la gente aplaudir y muy contenta porque las sillas se hicieron pocas”, comentó Erika Aedo, presidenta de la Junta de Vecinos de Pishuinco.
En efecto, fueron unas sesenta personas de Huellelhue, Pishuinco y Arique, sectores rurales al oeste de Valdivia, los que disfrutaron de la puesta en escena, a cargo de la productora Gea Creativa. “Había visto la obra muchas veces, pero es raro verlo en lugares como Huellelhue. Se agradece traer la cultura y el arte a las pequeñas localidades, por eso la gente responde con entusiasmo”, señaló Oscar Burgos, vecino del lugar. “La presentación estuvo excelente: los actores, la música y el público. Ojalá se puedan dar otros espectáculos artísticos tan lindos, y puedan llegar hasta acá”, agregó Marcela Soto.
Uno de los protagonistas de la obra es Tomacito, pretendiente de Carmelita, que es interpretado por el cantante local, Citadino. “En un inició sería el guitarrista, pero la primera directora vio que faltaba un Tomacito, me preguntaron si me gustaría actuar y dije que sí. Hacer estas presentaciones tiene el gustito especial de llevar al teatro donde no hay teatro,” aseguró el artista popular.
En esta ocasión, la obra comenzó con un minuto de silencio por la muerte de Meli Gallardo, vocalista de La Teruka, que fue sepultado el día de ayer. El próximo 9 de octubre será la nueva versión de la Pérgola, que se realizará en el Gimnasio la Mano ubicado en el tradicional sector Rubén Darío.
